club-mba.com

Todos perseguimos el éxito a lo largo de nuestras vidas y, del mismo modo, nos preguntamos qué podríamos hacer para conseguirlo.

Si bien no existe una fórmula matemática perfectamente diseñada para hacernos llegar hasta lo más alto, desde aquí queremos invitaros a ser testigos de unos cuantos consejos sacados de aquellos que lo han logrado, guiando así de algún modo a la siguiente generación.

1. Sé perfeccionista.

   Solo así conseguirás llegar a donde te propongas. De pequeños nos dicen que estudiemos para un “10”, y sacaremos un “5”. Ocurre lo mismo por mucho que lo magnifiquemos, la causa y el efecto es el mismo: no todo lo que hagamos va a salirnos bien, pero si aspiramos a la perfección, el resultado probablemente será más que aceptable.

2. No te limites.

   Busca siempre expandir tus horizontes sin perder la idea principal de tu proyecto. Es muy importante que, sin dejarnos caer en eso de “abarcar mucho, pero apretar poco”, encerrar o reducir metas nos hará “navegar a la deriva”, directamente.

3. Exprime tu materia gris.

   Recuerda que la “vulnerabilidad” no solo es un arma que los demás pueden usar en contra tuya, sino también un escudo para quien sepa utilizarla.

4. No creas en la suerte.

   Si bien es cierto que el factor “suerte” está ahí, es innegable y no a todos nos sonríe, debemos olvidar por completo que existe y tratar de dejar el mínimo de acontecimientos a su criterio. Trabajar duro, si bien no anula los efectos de la mala suerte, reducirá en mucho sus repercusiones.

5. Nunca te pares.

   Vale que todos pensamos y reaccionamos a velocidades diferentes, pero nunca te estanques. Si un refrán de toda la vida puede servirnos aquí, es ese de “sin prisa pero sin pausa”. Nunca dejes de moverte pues, sin saberlo, estás caminando en dirección contraria a dónde quieres llegar. Recuerda el punto 3. “Gente parada, malos pensamientos”.

6. Que las críticas no te den miedo.

   No puedes basar tu vida en gustar o no gustar a la gente. Lo primero y principal es uno mismo. Tú eres lo más importante que te ha pasado y que te va a pasar en la vida, jamás dejes que otros intenten decirte lo contrario. Las críticas constructivas deben convertirse en un ejercicio de autoconocimiento, del mismo modo que las críticas destructivas deben ser ignoradas por completo. Si, encima, son peyorativas o groseras… imagínate.

7. Cuenta solo contigo.

   Mucha gente ha abandonado sus proyectos más ambiciosos por delegar en otros. Es cierto que delegar es algo necesario y sano, pero procura encargarte de todo cuanto te sea posible, incluyendo los aspectos más personales de tu trabajo.

8. No prometas lo que no puedes cumplir.

   No hay nada peor en el mundo de los negocios que una persona sin palabra. Si quieres conseguir un puesto de responsabilidad, debes tener la responsabilidad de asumir tus propios límites y no prometer aquello que te es imposible. Una persona que conoce sus límites, llega el doble de lejos.

9. Busca el equilibrio.

   Todos tenemos puntos débiles, “vulnerables”. No dejes que tu potencial te ciegue; debes dividir tu atención en dos aspectos. Primero, mejora en aquello en lo que destacas. Inmediatamente después, trata de limar aquello en lo que no destacas, para así no hacerlo tampoco de forma negativa.

   

10. No culpes a otros.

    Como dijimos antes, si cumples estos puntos te darás cuenta de que aquello que no salga como debe, depende únicamente de ti mismo. No trates de escurrir el bulto cuando no llegues a donde debes, céntrate en encontrar las respuestas para corregirlo. Asume tu responsabilidad siempre.

11. Dirige tus pensamientos negativos.

    Todos nos venimos abajo y pensamos que nuestros proyectos no son lo suficientemente buenos. Que no tenemos las habilidades que otros tienen y que, simplemente, somos peores. No os dejéis llevar por estas pequeñas trampas del cerebro humano, pues solo aquellos que se enfrentan a sus miedos y siguen adelante consiguen triunfar en la vida.

12. No vivas en el pasado.

    Lo que ya ocurrió, ya tuvo su importancia. No quieras dar prioridad a lo que has vivido sobre lo que aun debes por vivir y, por encima de esto, no des prioridad a nada más que el presente. Si trabajas tanto a corto como a largo plazo, necesitas simplemente eso; trabajar. No significa que no te planifiques y distribuyas el trabajo, significa que si hoy trabajas como un león, tu futuro será un poco más alentador, eventualmente.

13. No intentes hacer amigos.

    Tu trabajo, tu pasión, te corresponde únicamente a ti. No quieras buscar el agrado de otros ni plantear tus objetivos según las varas de medir de otros. Tienes que mostrarte tal y como eres delante del espejo. Entiéndete primero, luego llegarán los verdaderos amigos.

14. No cedas al rencor.

    Haya pasado lo que haya pasado, el rencor es una total pérdida de tiempo y un lastre tanto en el ámbito personal como profesional.

15. Las malas compañías…

    Jamás traen nada bueno. Elige bien tanto a tus amigos, como a tus “rivales”. Aquellos a quienes quieran superar deben ser un espejo de aquello en lo que quieres convertirte, nunca olvides esto.

16. Las comparaciones son odiosas.

    No dejes que te afecten, como dijimos ya en el punto número 13, se trata de que seas tú mismo el que te gustes; no debes necesitar el afecto de otros, tan solo tomar de ellos las referencias que necesites para desarrollar un trabajo realmente bueno. No dejes que te limiten, no dejes que una mala comparación te afecte. ¡Sigue adelante!

17. Tú puedes.

    Este es, sin duda, el mejor consejo que puedes darte ante el espejo: tú puedes. Si trabajas duro, usas la lógica y te quieres un poco, descubrirás que los límites son como las fronteras: las dibujamos las personas.

Imágenes: ‘Pointing at button’ by Steve Wilson, licencia de Creative Commons CC BY-ND 2.0 ; ‘Businessman Crossing the Finish Line’ by Meridican, licencia de Creative Commons CC BY-ND 2.0