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Hablamos de John Paul DeJoria, cofundador de Paul Mitchell Hair Products y Patrón Tequila (entre otras muchas), quien tiene muy claro cómo ha de empezar un buen día de trabajo.

“No importa donde esté, en qué casa o en qué hotel, una vez me despierto y antes de ponerme a funcionar, me quedo tan solo cinco minutos más en la cama”

 

Este hombre encarna el sueño que todos llevamos dentro: cambiar nuestro propio destino.

John Paul DeJoria llegó a convertirse en uno de los mil hombres más ricos del mundo, pero sus orígenes son mucho más humildes. Con tan solo nueve años trabajaba para ayudar a su madre que, cuando él tan solo tenía dos años, se divorció quedándose con todos los gastos. John Paul y su hermano mayor ayudaban vendiendo periódicos para tratar de conseguir suficiente para llenar la tripa un día más.

Después de ser abandonados por su madre en un centro infantil, debido a verse económicamente incapaz de cuidarlos, la falta de referentes paternos le llevó al camino de las bandas y la delincuencia hasta que la frase de un profesor, para nada vocacional, le llevó a cambiar completamente su conformismo para siempre. “Nunca tendrás éxito en nada de lo que hagas en la vida” vino a decirle aquel profesor, aunque por lo visto el joven John Paul decidió no hacer mucho caso.

Ahora, él simboliza la superación personal como ningún otro desde que alcanzó el trampolín empresarial de mano de la cadena de peluquería Redken.

¿Qué podemos aprender de él?

Cuenta este adinerado maestro del estilo que no utiliza este tiempo, como muchos pensaréis, para decidir qué y cómo va a actuar a lo largo del día, si tiene o no acuerdos que cerrar o, simplemente, un breve memorándum cual lista de la compra. No, John Paul asegura que “aprovecha este momento para darse cuenta de lo agradecido que está a la vida”

Después de esto, un buen millonario ya procede a preparar su café o cappuccino. “Soy una persona que amo mi trabajo” nos revela recordándonos que la motivación personal es la clave para llegar lejos en la vida. Luego, comienza la agenda hablando con su equipo de asistentes tanto en Austin como en Los Ángeles. El momento en que un hombre se pone al día para agarrar las riendas de la vida con decisión. “No mando Emails, ni utilizo ordenadores para nada en mi trabajo” cuenta que una de sus frases favoritas dice “pon atención a lo poco importante, e ignora lo mucho trivial” literalmente, algo así como saber sintetizar la información que nos llega cada segundo. Hablando de frases para triunfar, su receta nos trae otra que dice “La gente exitosa hace todas esas cosas que la gente que no es exitosa se niega a hacer” lo cual no deja de ser muy cierto y profundo.

Ante todo, concluye, “diviértete”, pues está más que demostrado ya que triunfar en algo puede resultar muy sencillo si realmente amas lo que haces. La vocación no se compra.

Fuentes: Bussiness Insider, John Paul DeJoria, El Confidencial