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En los tiempos convulsos de crisis que lleva experimentando nuestra sociedad desde hace ya bastantes años, quizá demasiados, aventurarse a especular sobre qué estudios contarán con mayores o menores salidas laborales en el futuro puede parecer, cuanto menos, arriesgado.

No obstante, podemos partir de una serie de presupuestos básicos con los cuales establecer unas directrices a modo de guía para intentar dilucidar el devenir del mercado laboral. Para ello, hay que reflexionar sobre lo que la sociedad demanda y sobre si nosotros estamos o podríamos estar en potestad de ofrecérselo.

En principio parece claro que las carreras de ciencias, tales como Aeronáutica, Ingeniería, arquitectura y ciencias de la salud son las que tradicionalmente y a años vista tendrán un mayor índice de empleabilidad. No obstante, si las ciencias puras no son nuestro fuerte, hay que proseguir con el análisis.

Así, desembocamos en las ciencias sociales, tales como Economía, Finanzas, Derecho y Marketing. Estas carreras cuentan con varias ventajas:

• En primer lugar, son asequibles tanto para alumnos de ciencias puras como para alumnos de ciencias sociales e incluso de humanidades debido a la temática de las mismas.
• En segunda instancia, la sociedad siempre ha tenido y tendrá una elevada demanda de profesionales y expertos en temas tan delicados como el derecho, la economía y las ventas.
• Por último y como gran ventaja con respecto al resto de carreras, tanto de ciencias puras como de humanidades, los estudios de ciencias sociales cuentan con un abanico muy diverso de salidas laborales, pues en su mayoría pueden ser desarrolladas en el seno de grandes empresas, o en empresas que ayudan a otras empresas, o a nivel autónomo.

Estudios de Marketing, paradigma de empleabilidad

Pongamos como ejemplo que decides estudiar marketing. Una vez que has terminado la carrera tienes muchas opciones entre las que elegir. Puedes cursar un máster y al finalizar intentar hacer prácticas en alguna empresa de las numerosas bolsas de trabajo que tendrás a tu disposición. Tras lograr el máster no sólo tienes la posibilidad de hacer prácticas de empresa, sino que también podrás optar a una gran cantidad de puestos de trabajo en empresas que demandan profesionales del marketing capaces de incrementar las ventas y dar así una mejor salida a sus productos.

Por otra parte, si te parecen pocas las salidas que exponemos, siempre podrás autoemplearte como autónomo beneficiándote de las múltiples prestaciones y bonificaciones existentes para los emprendedores. Así, al montar tu propia empresa de marketing o trabajar como asesor de marketing externo, podrás ofrecer unos servicios altamente demandados gracias a las ideas, estudios y enfoques nuevos por parte de terceros que ansían aquellas empresas que necesitan relanzar sus ventas o introducir sus productos en el mercado.

En resumen, hemos visto cómo estudiar marketing cumple con todas las premisas enunciadas. Es decir, es una disciplina cuyo estudio interesa tanto a los amantes de los números como a los más creativos. Por otra parte, es muy demandada por la sociedad ya que los productores, siempre querrán mayores ventas. Y por último, ofrece gran variedad de formas de empleo una vez finalizados dichos estudios.

* Nota de prensa