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El Executive MBA suple la “desventaja” de la falta de asistencia con la posibilidad de aplicar lo aprendido en un entorno laboral activo

El Executive MBA orienta a sus estudiantes a realzar sus capacidades de liderazgo para gestionar y orientar con eficacia la dirección de una empresa. Este tipo de estudios se suele vincular al campo estrictamente económico, sin embargo cualquier modelo de estudio es válido para desempeñar con éxito este Máster y cosechar nuevas oportunidades en el ámbito laboral.

Las empresas abarcan todo tipo de orientaciones, desde el medioambiente y las finanzas hasta el montaje de música o la edición de libros. El executive MBA organiza las aptitudes de creatividad y liderazgo de un individuo para que su aportación y enfoque se adapten a las circunstancias que necesita una entidad empresarial, con un tratamiento profesional de los medios y la organización disponibles, que permiten rentabilizar el tiempo y energías a las tareas de mayor provecho.

Como comentamos en el artículo MBA Online VS Presencial, las ventajas de realizar un curso no asistencial son numerosas, pues supone una reducción del coste monetario y también del “coste de oportunidad”.

El “coste de oportunidad” puede relacionarse directamente con el tiempo y como se emplea, un recurso valioso que determina la posibilidad de desarrollarse y que en ocasiones escasea. Las MOOCs han cambiado el modelo educativo aportando nuevas plataformas que permiten adaptar el espacio y el tiempo de un individuo según sus necesidades.

La posibilidad de realizar un Executive MBA a distancia permite mantener una nueva postura de enfoque en la posición laboral sin tener que abandonar el puesto de trabajo. Muchas empresas optan por enviar a sus trabajadores a estos cursos de Executive MBA. Otros profesionales deciden realizar uno por su cuenta para obtener mejoras en su sueldo y sus capacidades de trabajo.

Gracias a estos cursos online la necesidad de no abandonar un puesto de trabajo para realizar el curso permite una nueva posibilidad de formarse sin tener que renunciar a un sueldo, lo que se traduce en una reducción de costes para la empresa y para el propio trabajador, que puede seguir ejerciendo sus tareas mientras estudia.

El Executive MBA suple la “desventaja” de una falta de asistencia con la posibilidad de aplicar lo aprendido en un entorno laboral activo. Esta posibilidad añade nuevas oportunidades de formación que se compaginan con una aplicación directa y práctica de los conocimientos adquiridos, además aquellos que realicen un curso virtual bajo estas prerrogativas no tendrán que preocuparse de que su título online se valore menos que un presencial al estar incorporados en una empresa en sí.

Las desventajas o ventajas de un curso online y uno presencial no parecen ser la cuestión a responder, sino las posibilidades que abre la educación virtual. En el caso de un Executive MBA los datos reflejan que la mayoría de sus estudiantes son personas con una experiencia profesional de entre cinco y diez años integrados al mundo laboral; en este caso las ventajas de un Executive MBA online parecen claras. Sin embargo aquellas personas que carezcan de empleo pueden encontrar más útil una modalidad presencial, pues el contacto con el profesorado y los compañeros sumado a la cobertura que ofrecen las escuelas de negocios respecto a la búsqueda de empleo suelen ser por lo general muy amplias.

* Foto de Bureau of IIP “Portrait of a female executive” en Flickr

* Nota de prensa