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Desde el nacimiento de la primera generación del iPad en 2010 mucho se ha debatido sobre si las tablets son herramientas realmente productivas de trabajo o si por el contrario son simplemente una forma muy cómoda y práctica de navegar y consumir contenido. Sobre este tema ha habido todo tipo de opiniones a favor y en contra. Sin embargo y con la presentación de la nueva Surface Pro 3 por parte de Microsoft, debemos reabrir el debate sobre si las tablets llegarán a sustituir al PC como la herramienta predeterminada de trabajo.

A pesar de que algunos modelos de tablets ya existían en algunos entornos laborales, la primera tablet disponible al gran público llegó de la mano de Apple. Desde entonces, han ido apareciendo nuevas tablets de diversos fabricantes (Samsung, LG, Asus etc…) con diferentes sistemas operativos (iOS, Android, Windows). Su crecimiento ha sido rápido en poco tiempo y se han convertido en un dispositivo esencial en la vida de muchos. Prueba de ello son los estudios de BI Intelligence, un servicio de investigación de mercados, que determinaron que a finales de 2013, el 6% de la población global poseía algún tipo de tablet, el doble que a finales de 2012 (el PC se mantuvo estable en un 20% en el mismo periodo y los Smartphone pasaron del 16% al 22%).

No es de extrañar esta subida, ya que además del aumento en popularidad, las tablets equipan nuevas funciones y hardware que permite que se utilicen para realizar tareas personales y profesionales cada vez más complejas. No obstante, muchos siguen resistiéndose a abandonar el PC y adoptar una tablet como herramienta de trabajo predilecta. Las razones más citadas están relacionadas con el reducido tamaño de la pantalla (9 pulgadas de media), la falta de un teclado adecuado, hardware limitado (no sólo en potencia y capacidad, sino también en falta de recursos como puertos USB) y sobretodo la inexistencia de un sistema operativo plenamente compatible con todo el software necesario para trabajar (CRM´s, ERP´s, programas específicos como AutoCad etc…)

Sin embargo, parece ser que muchos de los principales fabricantes han estado escuchando las quejas anteriormente citadas por usuarios para no dar el salto definitivo. Prueba de ello es la nueva Surface Pro 3 que según Microsoft tiene toda la potencia de un PC y la portabilidad de una tablet. ¿Sus armas? Una pantalla de 12 pulgadas full HD, una versión completa de Windows 8.1 (Donde podemos instalar cualquier programa compatible con Windows), puerto USB 3.0, disco duro SSD, procesadores que van desde un Intel i3 a un i7 de última generación y un teclado físico que además hace la función de funda protectora. Todo esto por un precio de entrada de 799€.

Microsoft no parece la única que ha tomado este camino. Según las últimas informaciones de portales de tecnología como Engadget o Gizmodo, Apple podría estar preparando una nueva versión de su iPad. La principal diferencia que tendría con sus antecesores tendría que ver con el sistema operativo, ya que contaría con la última versión de OS X y no iOS como hasta ahora. De ser así, compartiría sistema operativo con los ordenadores portátiles y de sobremesa de la compañía. Además, se da por hecho de que contaría con importantes cambios en hardware como una pantalla mayor, procesadores más potentes y un aumento en la capacidad de almacenamiento interna.

Como podemos ver, la dirección de los principales fabricantes es clara: Dotar a sus tablets con las características necesarias en hardware y software de manera que los usuarios puedan realizar las mismas funciones que harían en un PC sin perder la comodidad de una tablet.

Con estas nuevas configuraciones en las tablets… ¿Están capacitadas para sustituir definitivamente a los PC portátiles y de sobremesa?

Imagen de Flickr por Photo Giddy