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La economía española trata de dejar por fin atrás la recesión más prolongada de su historia reciente. En Octubre pasado se dio por segunda vez en cinco años que su producto interior bruto trimestral abandonase los números rojos. Los inversores prevén un inicio de la recuperación económica, sin embargo la población  mantiene su escepticismo ante tales noticias. Los recortes salariales, las altas cifras de paro y las astronómicas deudas estatales son el pan de cada día. Los expertos coinciden en que se deben mantener los ojos abiertos ante el futuro, pues aún quedan  problemas por solucionar en nuestra economía, aunque señalan que, como la crisis, la recuperación se anuncia en los mercados.

La bajada del paro, según datos del INEM en el mes de noviembre, se suma a esta nueva visión de las cosas que indica una ligera mejora respecto a la situación financiera en España. Órganos, instituciones y portavoces estatales atisban un nuevo horizonte con un taimado optimismo. No obstante, de nuevo, las encuestas al ciudadano indican lo contrario. A la pregunta de si la bajada del paro registrado refleja la realidad de nuestra economía, un 80% indica que no y opinan que el INEM está desfasado y la EPA es la que marca realmente la gravedad de la crisis.

Existen como siempre opiniones contrarias ante los resultados obtenidos por los últimos sucesos económicos que, sin embargo, no dejan de ser cifras constatables que pueden sustentar las bases de un plan de acción con el que afrontar las consecuencias de la crisis y aportar soluciones.

Ciertas declaraciones han sorprendido a los mercados. Goldman Sachs se retractó por sus predicciones negativas y erradas sobre nuestro país y el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, ha calificado de «impresionante» la transformación de nuestra economía.

A pesar de los indicativos de recuperación, Bruselas advierte que nuestro país no cumplirá los objetivos para este año sin más ajustes. El propio presidente del gobierno Mariano Rajoy, reconocía hace unas semanas, «La economía no se arregla con una norma, un decreto, o un discurso. Hay que trabajar mucho».

ESPAÑA TIENE POSIBILIDADES DE FUTURO

Los actuales resultados económicos han propiciado un nuevo enfoque sobre la crisis en nuestro país, cuyas posibilidades de expansión son por fin visibles. Una serie de expertos han opinado sobre los planes que se deben poner en marcha para relanzar la degenerada visión económica internacional que sufría España. Advierten ellos que el camino será arduo y resaltan seis puntos clave que el estado debe mejorar para continuar la senda marcada por los recientes sucesos positivos:

1. REFORMA DE LA ESTRUCTURA Y LOS PRESUPUESTOS ESTATALES

La reactivación del crédito en España junto a la necesidad de cumplir con los objetivos de déficit público es el primer punto que señalan los expertos. La estructura gubernamental en cuanto a racionalización de la Administración pública y el sistema de pensiones precisan de una reforma fiscal que dé respuesta al problema de la financiación autonómica y local además de contemplar las necesidades de empresas y emprendedores.

2. LA REACTIVACIÓN DEL CRÉDITO

Otro punto a mejorar según los expertos es la falta de créditos que permitan una expansión de inversión en las pequeñas y medianas empresas.

El Instituto de Crédito Oficial (ICO), entidad pública empresarial de España, ofrece actualmente una serie de créditos para paliar las deficiencias del sistema. El ICO pronostica, junto a algunas entidades financieras, que tras el saneamiento  y recapitalización del sector en España, las concesiones comenzarán a expandirse a las pymes, las cuales conforman más del 90% del tejido empresarial y que a su vez, aún después de los estragos de la crisis, generan más del 60% del empleo.

A pesar de que actualmente las grandes empresas sí reciben una financiación regular por parte de las entidades bancarias, las pymes aún sufren una contraproducente falta de crédito para sus inversiones que debe ser solucionada para mejorar la situación de este importante sector empresarial.

El Banco Central Europeo y su normativa prudencial Basilea III, cuyas medidas se aplican gradualmente desde el 1 de enero de 2013 hasta el 2019, trata la deuda pública como un activo libre de riesgo en las pruebas económicas de estrés practicadas a las entidades europeas. La experiencia de los últimos años demuestra que cuando la banca concentra sus esfuerzos en cumplir las exigencias de capital y solvencia, suele ir en detrimento de la concesión de crédito.

Sin embargo Nuria Álvarez, analista de Renta 4, explica que «todo lo que sea penalizar la deuda pública en balance es negativo para los bancos, porque les va a suponer más consumo de capital«, aunque ve complicado valorar «la magnitud del impacto» antes de que el BCE aclare en enero los criterios que va a aplicar. Álvarez cree que el 2014 va a ser otro ejercicio difícil para la banca, con «mucha volatilidad e incertidumbre».

3. MÁS INVERSIÓN

En la actualidad España vive un nuevo boom en inversión extranjera directa alcanzando los 21.664,3 millones de euros en los nueve primeros meses del año, frente a los 9.665 millones conseguidos en el mismo periodo de 2012, según informó el pasado mes de noviembre el Banco de España. Los expertos aseguran que sin una contribución a las nuevas ideas y la renovación empresarial seguirá existiendo una elevada tasa de paro y una falta consistente de consumo interno.

Los proyectos empresariales abren la puerta a una mejor competitividad y productividad que permite una incrementación del empleo. Las empresas españolas deben profundizar en la diversificación de sus exportaciones para mejorar su realidad en el mercado, enfocar los esfuerzos a un comprador alejado de Europa es una apuesta acertada, algo que ya se practica en la actualidad y está reportando considerables beneficios gracias a consumidores como América Latina, Asia y África.

Según Rafael Pampillón, profesor de Economía de IE Business School, tras el incremento de las exportaciones suele venir la inversión y después de ella el empleo, por la vía de un aumento de la utilización de la capacidad productiva del país que, a su vez, trae consigo una mejora en el clima de expectativas.

4. EL MERCADO INTERNO

Existe también la necesidad de mejorar la situación del mercado interno en lo que respecta al Impuesto de Sociedades. Un informe de PwC y el Banco Mundial, las empresas españolas soportan una carga tributaria del 58,6% frente al 41% de media de la Unión Europea. Esto supone un descenso competitivo de la economía española y un muro para la atracción de nuevas inversiones en el país y su incremento de puestos de trabajo.

Ante esta situación Mariano Rajoy anunció que la reforma fiscal que el Ejecutivo abordará este 2014 tendrá como «eje básico» ayudar a emprendedores, pymes y autónomos, al tiempo que reiteró que no habrá más subidas de IVA y que en 2015 bajará el IRPF.

5. EL APOYO  INTERNACIONAL

El apoyo internacional junto a su nivel de compromiso puede marcar el éxito o el fracaso de las nuevas medidas que aconsejan los expertos. Los planes adoptadas por el gobierno español tratan de suplir las deficiencias del mercado a partir del fomento y el desarrollo de negocios en el ámbito extranjero. El 62% de nuestras exportaciones son un gran motor de impulso en la actualidad junto al turismo, sin embargo se concentran en la UE y el 48,6% en los países del euro. «Si Europa se constipa y se desacelera, España se resiente», señala Enrique Quemada, consejero delegado de One To One Corporate Finance.

La voluble naturaleza actual del mercado europeo obliga a España a actualizar y expandir sus ratio de mercado a países alejados del continente, ello permitirá una mayor solvencia e independencia de España frente a los problemas que puedan acaecer dentro de Europa, de aquí parte la necesidad de invertir en mercados alejados del continente.

6. LA NECESIDAD DE UNA DIVISA ESTABLE

Un euro en niveles acotados y estables es el último de estos requisitos esenciales en el camino del país hacia la recuperación. Los expertos descartan que la economía española vaya a protagonizar un rally a medio plazo. Hay disparidad de opiniones: Goldman Sachs pronostica  que quizás crezca un 0,4% en 2014, el Gobierno vaticina un crecimiento del 0,7% y entidades como el BBVA un 0,9%.

VISIÓN DE FUTURO

La necesidad de todos estos cambios viene a constatar el hecho de que aún queda mucho por mejorar. La realidad económica en este país sigue siendo cuanto menos deficiente y todavía falta un largo trecho para la “total” recuperación. La gran cifra de desempleados, la deuda española y la situación general dejan mucho que desear.

Una actitud positiva ante los cambios y un esfuerzo por mejorar las deficiencias del sistema pueden redundar en resultados muy beneficiosos para nuestra economía. Puede que la mejor estructura no garantice resultados ni el rendimiento, pero una estructura equivocada es garantía de fracaso.

Fuentes: Expansión, El País, El Mundo, Europapress, Fórum libertas.