Afrontar las nuevas entrevistas en grupo de admisión a un MBA
Forma parte de la naturaleza humana el sentirse incómodo ante cambios inesperados y novedades desconocidas. No sorprende, por tanto, que muchos de los actuales candidatos estén preocupados sobre la nueva tendencia de las escuelas de negocio instaurando entrevistas en grupo. Ya el pasado febrero os hablábamos en el artículo El futuro de las entrevistas de admisión: vídeos y discusiones en grupo, de cómo Wharton había introducido esta idea a la que se han unido IMD en suiza y Ross School of Business en Michigan. En ellas, exigen a sus candidatos trabajar en grupo en una fase más del proceso de selección. Aunque cada una lo lleva a cabo de forma diferente – IMD propone un caso, Wharton hace preguntas o propone un tema, y Ross usa palabras aleatorias que han de ser conectadas en una suerte de planteamiento – el componente equipo permanece.
Existen consejos y formas de preparase para estos envites. La dinámica de grupo se centra en el grupo y en las habilidades sociales de cada cual, afirma Linda Abraham, presidenta y fundadora de la consultoría de admisión Accept.com, “El candidato debe considerar el éxito del grupo como lo principal” añade. Se ha de estar preparado para dejar hablar a los demás si tienen buenas ideas y para animar a aquellos que se muestren reacios en el grupo a que participen. Igualmente, hay que saber cuando intervenir: hablar cuando se tenga algo genuino e importante que compartir ayuda al rendimiento del grupo, sea cual sea la tarea que se tenga entre manos.
Parte de lo que produce inquietud es no conocer a qué te enfrentas. Previo a la entrevista, se ha de averiguar el formato que usa la escuela y qué se está evaluando, sugiere Graham Richmond, cofundador y jefe ejecutivo de la consultoría de admisión Clear Admit. Junto con sus compañeros, Richmon ha determinado que las escuelas usan este tipo de entrevistas para observar la capacidad para escuchar de los candidatos, la habilidad de improvisar ideas y decisiones, sus habilidades de comunicación, su curiosidad intelectual y la capacidad de trabajar en equipo. Por supuesto, esta lista variará de escuela a escuela, añade Richmond, pero son buenos puntos de partida para prepararse.
Una vez se conocen algunas de las cosas que serán analizadas, pueden trabajarse dichas habilidades, basándose en las propias fortalezas y debilidades. “La totalidad del proceso es un gran ejercicio de pensamiento” explica Ankur Kumar, director de admisiones MBA y del departamento de ayuda financiera de Wharton. “El mejor consejo que puedo dar a un candidato es afrontar el proceso como un ejercicio de auto-reflexión”. La aplicación en sí misma implica preguntas: ¿por qué un MBA? ¿por qué ahora? ¿qué quiero hacer con el resto de mi vida? El reto para los candidatos, dice Kumar, es encontrar el tiempo para pensar sobre sus respuestas. “No puedes esperar hasta el último minuto”, dice. “Cuanto mejor te conozcas a ti mismo, mejor entenderás como trabajar dentro de un equipo”.
Los comités de admisión de Wharton y Ross señalan que parte de las razones de que hayan adoptado la entrevista en grupo es que así los candidatos no podrán prepararse de la manera que lo hacen para los ensayos y las entrevistas individuales y esto les permite observar cómo son realmente. Es por ello que Soojin Kwon, director de admisiones de Ross, recomienda como preparación hablar en grupo y dedicar tiempo a pensar cómo presentarse, a la vez que advierte sobre la inutilidad de recitar discursos memorizados. “Queremos ver como son los candidatos sin guión, verles pensar y responder sin premeditación. En las entrevistas en grupo surgen cosas diferentes. Crea una imagen más completa de cómo serían esos candidatos en nuestras aulas y nuestra comunidad” afirma Soojin.
Fuentes:
– Business Week, Clear Admit.
Seguir a @club_mba
Seguir a @juanlurey
En IESE hay algo parecido en el proceso de admisión y estoy de acuerdo en que la clave está en la siguiente frase:
“El candidato debe considerar el éxito del grupo como lo principal” añade. Se ha de estar preparado para dejar hablar a los demás si tienen buenas ideas y para animar a aquellos que se muestren reacios en el grupo a que participen.
Un saludo